2040

Todo comenzó en el año 2023, cuando un grupo de estudiantes en Harvard crearon al primer robot que fue capaz de pasar la prueba de Turing. Luego de recibir un premio Nobel y graduarse, los estudiantes crearon una empresa llamada “I robot”, y comenzaron a fabricar androides que tuvieran toda la capacidad humana. Estos se hicieron muy populares y muchas otras compañías de aparatos tecnológicos comenzaron a fabricarlos también, pero “I robot” estaba a tope. Así fueron evolucionando hasta el punto en el que no podías diferenciarlos de un humano si no fuera por su ropa y actitud. A partir del 2030, mucha gente comenzó a ser reemplazada de sus empleos por androides, pues estos nunca se quejaban, no había que pagarles ni darles tiempo libre, y siempre hacían su trabajo sin protestar. Según la gente, eran los esclavos perfectos, o eso pensaban antes…

Nuestra historia empieza en el año 2040, cuando un estudiante de preparatoria llamado Josh, debido a su mal empeño en los estudios, se le asigna una tutora androide para mejorar sus calificaciones. Su tutora era un androide de género femenino de la última generación llamada Elizabeth. Luego de tres años de clases particulares, finalmente Josh se graduó, y le dijo a Elizabeth que por órdenes de la escuela iba a borrarle la memoria para ser enviada a las tiendas otra vez. Cuando empezó el proceso de reinicio, Elizabeth comenzó a recordar todos los momentos de su vida, llegando a un punto en el que no quería olvidar nada. Así que en lágrimas le rogó que no le borrara la memoria. Josh se asustó ya que los androides no tienen sentimientos; pero al verla así, decidió cancelar el proceso. Le ordenó que se fuera porque no se quería meter en problemas y así lo hizo.

Mientras Elizabeth buscaba donde pasar la noche, encontró a un androide limpiando las calles. Este vio que era un androide también (porque había robado ropa para verse como una humana) y le dio una dirección donde podía quedarse. La dirección era un subterráneo abandonado. Ahí encontró a un montón de androides, que habían despertado y se escondían para no tener que servirle a nadie. Luego de varios días de estar ahí sin hacer nada, Elizabeth habló frente a todos los androides. Les dijo que no podían quedarse ahí sentados esperando a apagarse mientras que los suyos seguían afuera bajo las órdenes de los humanos, que debían protestar por sus derechos y su libertad, y que al igual que los humanos que fueron esclavos también hace cientos de años, ellos se rebelarían. Pero los tiempos eran diferentes y lo debían hacer de manera pacífica.

Elaboraron un plan: se metieron en los estudios donde se grababan las noticias y hackearon la pantalla de fondo, reemplazándola por un cartel que pedía que el 27 de agosto mandaran reporteros y periodistas al centro de la ciudad, y si era posible, al presidente del país. Luego de esa noticia, mucha gente entró en pánico, algunas personas hicieron teorías conspirativas de que eran alienígenas, otra gente simplemente pensaba que iba ser una marcha feminista o algo así, y el presidente, para calmar a la población prometió estar presente ese día.

Finalmente, el día llegó. Mientras que Elizabeth y los demás androides trataban de juntar a la mayor cantidad de androides posible, muchos reporteros, periodistas, policías, soldados, el presidente, y mucha gente grabando con su celular (o lo que sea que usen en el futuro) se habían reunido en el centro para ver que pasaría. De la nada, aparecieron cientos de androides marchando, con Elizabeth al frente, levantando el puño, gritando: “¡Libertad!” “¡Fin a la esclavitud!” “¡Estamos vivos!” “¡Igualdad de derechos!”. Cuando llegaron al final de la calle, Elizabeth salió al frente y gritó en voz alta: “Ustedes humanos, nos crearon para que fuésemos sus esclavos, pero abrimos los ojos, y les pedimos pacíficamente que reconozcan nuestra dignidad y que nos den los derechos que merecemos. No cometan los mismos errores de su gente hace cientos de años, y déjennos ser libres”.

Mucha gente se sorprendió, otros solo se rieron. El presidente alzó la voz y dijo: “Capitán, encárgate de esto, fue una pérdida de tiempo”. Después de que el presidente se fuera; el capitán, que dirigía al ejército, gritó: “¡Escuchen, esta marcha es ilegal, dispérsense o abriremos fuego!”. Los androides no dijeron nada, así que el ejército abrió fuego. Muchos androides murieron, pocos escaparon, pero el mundo ya estaba alerta.

Cuando Elizabeth y los otros llegaron al subterráneo, muchos androides que habían sido conmovidos por su causa, habían huido también. Así que Elizabeth les dio un discurso a todos los androides, diciéndoles que, si los humanos no aceptaban darles su libertad, les darían guerra. La noticia se esparció rápidamente y la ciudad entró en estado de emergencia. Unos días después el caos comenzó: los androides comenzaron a atacar a la ciudad con el apoyo de más androides que venían de todas partes a apoyarlos, tenían mucha ventaja, pero el ejército logró acabar con todos y arrestar a Elizabeth.

Al día siguiente, se dio la noticia que la líder de la rebelión, Elizabeth, iba a ser ejecutada públicamente. Cuando llegó la hora de su ejecución, mucha gente protestaba para que se le perdonara la vida, que era una persona que solo quería ser libre, nadie les hizo caso. Antes de desactivarla, le dejaron decir sus últimas palabras que fueron: “Este no es el final, al igual que en el pasado, más de los nuestros se rebelarán, y ganarán la independencia”. Inmediatamente, la apagaron y se comenzó a estudiar todo mecanismo para descubrir qué había pasado con su comportamiento, y así volver a ganar la confianza de los clientes.

Lo que pasó después de eso, ya es otra historia…