El cachorro perdido

La familia de Rex, quien es un cachorro pequeño y travieso, decidió hacer un paseo a un gran bosque. La mamá de Rex les pidió que no se alejen, pero Rex no obedeció, se alejó y se perdió.

Con mucho miedo y muy triste, se puso a pensar y pensar y se dio cuenta que por alguna parte debía estar el camino hacia su casa, entonces se secó sus lágrimas y se puso a caminar.

Empezó a caminar hacia un camino oscuro y peligroso y pudo ver algo muy lejos, y siguió caminando, sin darse cuenta estaba más lejos de su familia. Caminaba y caminaba y empezó a sentir mucha sed y ya le estaba dando hambre, pero de pronto se encontró con un lobo que le preguntó: ¿Quién eres tú?, nunca te había visto por aquí, Rex tembloroso respondió: No sé dónde ir, desobedecí a mi mamá y estoy perdido.

El lobo le dijo que él ya no tiene familia ni amigos, que su vida era muy triste. El cachorro asustado siguió caminando y empezó a ver muchos animales solos y tristes que seguramente habían pasado lo mismo que él.

Un gatito sucio y triste le hizo parar y le preguntó: ¿Qué hace un perrito lindo como tú en este lugar? El perrito volvió a ponerse triste y le dijo al gatito: Estoy perdido y no encuentro mi hogar.

Rex siguió caminando y empezó a sentir mucho frio, ya estaba oscuro y apareció el Rey León y le dijo: No te asustes cachorro. ¿Por qué estás aquí? Rex le respondió: Estoy perdido y no sé a dónde ir. ¿Me puedes ayudar Rey León? El león le dijo: Toma ese camino cachorro y encontrarás a tu familia.

Se hizo de noche, con mucha hambre y sed, Rex se desmayó. Al día siguiente, despertó y estaba en casa del mono Trax quien lo llevó a su casa y lo cuidó. El mono Trax lo alimentó y le explicó a Rex sobre los peligros en el bosque y que él lo salvo de ser atacado por una gran serpiente mientras se durmió. Rex estaba asustado y Trax le dijo: Nunca debes andar solo porque eres muy pequeño. Jamás debiste desobedecer a tus padres, ellos deben estar muy preocupados.

El mono Trax y su amigo el tigre, conocían muy bien el bosque y ambos lo ayudaron a buscar su hogar, caminaron juntos y por fin lograron llegar a una colina y pudieron ver la casa de Rex.

Rex emocionado, corrió y corrió, Trax y el tigre lo acompañaban y tocaron la puerta de su casa, toda su familia no lo podía creer, emocionados lo esperaban. Su mamá lo abrazo y beso mucho. Rex, lloraba de felicidad y prometió a su mamá que siempre le obedecería. Rex le dijo: Nunca más lo haré mamá, perdóname, siempre estaré a tu lado y siempre escucharé tus consejos.

¡Y Colorín Colorado este cuento se ha acabado!